Correr en la calle o en la cinta

¿Carretera o cinta? Se trata de una pregunta que, históricamente, ha dividido a la comunidad del running. ¿Es la cinta tan eficiente para correr como el asfalto? ¿O deberíamos dejar el gimnasio y seguir corriendo en la calle? Estos son todos los detalles sobre uno de los debates más acalorados del running.

ㅤ

CORRER EN LA CINTA ES MÁS FÁCIL

Lo primero es lo primero: la realidad es que correr en la cinta es más fácil en términos de consumo de energía que correr en carretera. Esto se debe a que la cinta favorece la rotación de las piernas, lo que quiere decir que muchas de las personas que corren en cinta notan que su paso no se corresponde con el que tienen en carretera. En la calle son nuestras piernas las que nos tienen que impulsar hacia adelante, enfrentándonos a la resistencia contra el viento, lo cual no existe en la cinta. Esto significa que hay más gasto de energía cuando corremos en la calle.

ㅤ

PERO SE PUEDE CAMBIAR...

Las buenas noticias para los fans de la cinta son que este efecto se puede contrarrestar. Una investigación realizada por la Universidad de Exeter concluyó que programar la cinta a un 1% de inclinación (o 2% para los corredores de élite) era suficiente para imitar con precisión el coste de energía de correr en la calle. Estudios más recientes también concluyeron que, con esta técnica, el VO2 máx. no cambia, y tampoco lo hacen los patrones biológicos de pisada, lo que nos aporta aún más evidencia de que correr en la cinta puede ser tan eficiente como correr en carretera.

ㅤ

LA CINTA ES GENIAL TRAS UNA LESIÓN

Correr en la cinta es más fácil para las piernas que correr sobre asfalto, que produce estrés en las articulaciones. Esto son buenas noticias para los runners que se están recuperando tras una lesión, especialmente si es una lesión relacionada con el impacto, a quienes les vendrá bien correr por una superficie menos dura para trabajar la fuerza.

ㅤ

EL FACTOR ABURRIMIENTO

Existe una razón por la que algunos runners llaman a la cinta el "dreadmill" (de "treadmill", cinta en inglés). Psicológicamente, correr en la cinta es más duro. En la calle tenemos los estímulos añadidos de las vistas, los sonidos, las diferentes rutas, las subidas y bajadas y los giros y cambios de dirección que nos distraen durante una carrera difícil. En interiores se produce el efecto del hámster en la rueda – trabajo duro para no llegar a ningún sitio. Esto puede resultar mentalmente agotador cuando estamos cansados.
ㅤ

LA CINTA TAMBIÉN ES BUENA PARA PRACTICAR VELOCIDAD...

¿Alguna vez te ha costado encontrar un recorrido llano para trabajar velocidad? La cinta es una gran herramienta si lo que quieres es mejorar tu velocidad. Te permite realizar entrenamientos de intervalos sin tener que evitar las colinas y obstáculos. La cinta hace que sea fácil controlar tu ritmo y tus tiempos y reduce el impacto que suelen tener los entrenamientos de velocidad. Dicho esto, algunos estudios han demostrado que nuestra percepción de la velocidad en la cinta suele ser más alta de lo que realmente es: tenlo en cuenta.
ㅤ

...PERO CARECE DE ELEMENTOS DE VARIACIÓN

Cuando trabajas en la cinta estás ejercitando una serie específica de músculos. En la carretera y el trail naturalmente nos encontramos con colinas, descensos, giros y obstáculos, lo que supone un acondicionamiento de los grupos musculares auxiliares, lo que a su vez proporciona un entrenamiento más completo para obtener un mejor rendimiento y resistencia generales. También existe una corriente de pensamiento que sugiere que, debido a su "elasticidad", la cinta de correr no ejercita los tejidos blandos.

ㅤ

EXPOSICIÓN AL CLIMA

Si alguna vez has intentado correr con un fuerte viento de cara, sabrás que la posibilidad de librarse de él es muy tentadora. La cinta de correr también puede ser una gran opción cuando hay hielo en el exterior y puedes llegar a resbalar: la cinta nos permite entrenar cuando las condiciones del exterior lo impedirían o lo harían potencialmente peligroso.

Aunque hay otro "pero". Correr con viento de cara o con otras dificultades debidas al clima te hace trabajar más duro, es decir, tu entrenamiento será más eficiente. Al igual, entrenar con calor puede mejorar tu rendimiento cuando hace frío. ¿El resultado? Entrenar al aire libre en condiciones meteorológicas adversas puede mejorar el efecto general del entrenamiento de nuestra carrera de una forma que no se consigue corriendo en la cinta. Si tienes pensado correr con mal tiempo, echa un vistazo a nuestra selección de chaquetas de running para protegerte de las inclemencias del tiempo.

ㅤ

CORRER AL AIRE LIBRE TE HACE MÁS FELIZ

Mientras que correr de por sí favorece la secreción de endorfinas, hormonas relacionadas con la felicidad, esto aumenta cuando se corre al aire libre. Se ha demostrado que hacer ejercicio al aire libre – o lo que también se conocer como "ejercicio verde" – nos hace más felices, favoreciendo un estado de ánimo calmado y disipando el estrés del día a día. Esto es un gran incentivo para que te eches a la carretera y a los trails, especialmente cuando estás estresado y bajo presión.

ㅤ

CONCLUSIÓN FINAL

Para concluir, hay pros y contras tanto de usar la cinta de correr como de correr al aire libre, por lo que tus preferencias personales dependerán de ti y tus objetivos como runner. Si te estás preparando para una carrera, tendrá más sentido entrenar al aire libre porque se parecerá más a las condiciones que tendrás el día de la carrera. De forma similar, si te estás recuperando de una lesión, la superficie más indulgente de la cinta te será de ayuda. Para obtener lo mejor de ambos mundos, te recomendamos integrar las dos opciones en tu entrenamiento, por ejemplo, haciendo tu sesión de velocidad en la cinta de vez en cuando o utilizándola cuando las condiciones exteriores no se presten para correr.

ㅤ

¿Buscas más consejos sobre cómo entrenar? Entonces dirígete a nuestra categoría Entrenamiento en la que nuetros atletas y expertos explican todo lo que necesitas saber.